Ni ahí con concluir.
Entonces, estrechó su mano. Aquella chica C1-C2, estrechó la mano de un indigente. Si hubiesen estado precisamente ahí y hubiesen visto lo que yo, comprenderían (espero) lo que sentí. Toda barrera, prejuicio o lo que sea, toda repulsión... todo quedó reducido a nada.
No poseo ganas de escribir.
Twitter Updates
sábado, 31 de mayo de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario